Sunday, June 5, 2011

EXISTE DIOS? por Anónimo

EXISTE DIOS? por Anónimo

Un hombre fue a una barbería a cortarse el cabello y recortarse la barba,
y entablo una amena conversación con la persona que le atendía.
Hablaron de muchas cosas y tocaron muchos temas. De pronto tocaron
el tema de Dios.
El barbero le dijo: "Fíjese caballero que yo no creo que Dios exista como
usted dice".
Pero ¿por que dice usted eso?- pregunto el cliente
"Pues es muy fácil basta con salir a la calle para darse cuenta de que Dios no
existe. O...dígame acaso si Dios existiera habría tantos enfermos?
¿Habría niños abandonados? Si Dios existiera no habría sufrimiento ni tanto dolor para la humanidad. Yo no puedo pensar que exista un Dios que permita todas estas cosas.
El cliente se quedo pensando un momento, pero no quiso responder para evitar
una discusión.
El barbero termino su trabajo y el cliente salio del negocio. Recién abandonada
la barbería, vio en la calle a un hombre con la barba y el cabello largo; al parecer
hacia mucho tiempo que no se lo cortaba y se veía muy desarreglado.
Entonces entro de nuevo a la barbería y le dijo al barbero: ¿Sabe una cosa?
Los barberos no existen.
"¿Como no existen?-pregunto el barbero. ¿Si no estoy yo y soy barbero?
No!-dijo el cliente-, no existen, porque si existieran no habría personas con el pelo
y la barba tan larga como la de ese hombre que va por la calle.
"Ah, los barberos si existen, lo que pasa es que esas personas no vienen hacia mi."
Exacto!- dijo el cliente- Ese es el punto. DIOS SI EXISTE LO QUE PASA ES QUE
LAS PERSONAS NO VAN HACIA EL Y NO LO BUSCAN, POR ESO HAY TANTO
DOLOR Y MISERIA

Memorias de mi primo Alonso Tapia (QEPD)

Memorias de mi primo Alonso Tapia (QEPD)
A los 7 anos de su transferencia

Fue en el año 1973 cuando nos trasladamos desde los Estados Unidos para ir a vivir a Nicaragua. Cuando llegamos a Masaya no conocíamos a nadie de nuestros primos, tíos, y familiares. Me acuerdo de Alonsito o el Chinito como le llamábamos con cariño por su apariencia con sus ojos medios cerrados y alargados, su estatura bajo y gordito porque fue uno de los primeros primos que se introdujo a su manera y nos inicio a la cultura y ambiente de este extraño país al cual acabamos de llegar. Alonsito el menor de sus hermanos Edgar y Napoleón todos ellos hijos de mi Tia Yila estaban viviendo en la casa de mi Abuelita Nila en Masaya desde el Terremoto del 72. Me llamo la atención Alonsito porque usaba un vocabulario muy diferente que al que yo estaba acostumbrado a escuchar por ejemplo saludos y expresiones Nicas como Que paso Maje? mira que Búfalo, como estas fiera? chocho, carajo, bueno un sin fin de decires y y también las malas palabras que no puedo mencionar en este ambiente familiar. A Alonsito le gustaba fregar a sus primos con emphasis a mi hermano Ricky y a mi primo Davy y los retaba a pelear cuando se enojaban con el pero los intimidaba con su tamaño y peso. Rumbo al Colegio para fregarnos les abría hoyos a los bolis de chicha y nos las disparaba los chorros a nuestras camisas blancas de uniforme que usábamos. Alonso también le encantaba apodar a la gente a mi me decía de todo porque usaba anteojos me decía "Cuatro Ojos" o "Culos de botella" "ceguetas" bueno nunca le faltaron adjetivos.
Años después ya mayor Alonso me confió y me dijo, "Alfredito perdóname, a vos nunca te fregaba como a Rick y Davy porque no te enojabas, y te admiro por esa qualidad pacifica que tienes" Bueno no supe que contestarle creo que le di gracias. Su voz suave de niño mimado era difícil de resistir y ignorar y Alonso sabia como usarla para endulzar y salir con las suyas. Alonsito tenia un buen corazón varias veces vi como se compadecía y ayudaba a los necesitados con dinero y compartía el evangelio cuando vivíamos en Masaya.
Años después, ya en los Estados Unidos estuvimos en contacto varias veces mediante bodas, celebraciones, y eventos de familia. A pesar de los años mantuvo su apariencia física. su sentido de humor, y su personalidad. Era el mismo que había conocido en Nicaragua.
Cuando nos juntábamos nos reímos al recordar aquellos días felices que pasamos en Masaya.
Así recuerdo a mi primo y amigo.
Te extraño
Al García

Wednesday, April 13, 2011

ALMIRANTE


Poema dedicado a mi Abuelo Terencio García Macias (QEPD)(El Almirante de tierra firme)



Almirante de tierras rusticas a ti te canto hoy!

Recorría en tu sangre,

Orgullo de toro Branham

Tu cuerpo traía olor a tierra,ríos, y ganado.

En tus ojos azules marinos claros,

se remontaban los cenzontles

desafiando los alisios del rió Rama.

Adiestraste a hombres, bestias, y campo

desafiaste la tierra con tus manos fuertes y firmes

y la sembraste con dolor, sudor, y sangre

y su fruto retoño en el aciago día

Herencia viva para el Señor de la mies.



Mateo 9:38 "Rogad, pues, al Señor de la mies, que envié obreros a su mies"



Al García

Le doy gracias a mi prima Angela Dora Caldera (Angie) por la photo

BREVES DATOS DE MI VIDA

BREVES DATOS DE MI VIDA

1.) Nací el 29 de Agosto de 1964 en San Francisco, California. Aunque no soy Nicaragüense de nacimiento me considero Nicaragüense por medio de mi linea paternal. Al nacer me pusieron Alfredo Adolfo Garcia Jr. El nombre de mi padre. El nombre Alfredo proviene de uno de los primeros misioneros Bautistas que llegaron a evangelizar a Nicaragua llamado Alfredo Benjamín De Roos. Soy Tataranieto de Terencio Garcia Cuadra y Lola Macias. Soy Nieto de Terencio Garcia Macias y Petronila (Nila) García Mejia . Mis padres son Alfredo Garcia Mejia y Irlanda García Osorio(de origen guatemalteco).

2) De los 9 a los 14 años (1973-1979) viví en Masaya Nicaragua. El pueblo y hogar de mis progenitores. Mi niñez y primeros años de juventud están llenos de recuerdos y memorias de mis abuelos, tios, y primos que ahora ya mayor me acompañan llenando mi vida de una riqueza espiritual, calor, y gozo que hasta hoy en día no han podido igualar.

Como no acordarme de aquellas vigilias de oración con mi abuelita Nila que temprano de mañana se levantaba a buscar el rostro de Dios y rogar por cada uno de nosotros. Oraba desde el primero de sus hijos hasta el ultimo de sus tataranietos y después terminaba con un devocionario y cantos de alabanza. Como no acordarme de esa señora sabia que al terminar el culto del domingo nos daba un chelín para comprar sorbete. Como no acordarme de esa santa anciana cuando pastores, laicos, y amigos, llegaban al asseradero a pedir consejos y apoyo a Mama Nila como le llamaban con aprecio y cariño . Como no acordarme de su fidelidad, su lealtad, su amor por las cosas de Dios. Como no acordarme de esa sonrisa de paz, seguridad, y confianza que brindaba y radiaba.

3) Mi vida espiritual tiene su origen literalmente a los regazos de mi abuela. Observaba como evangelizaba repartía biblias, tratados, y folletos a todos los que llegaban a comprarle madera al aserio, Siempre estaba invitando a la gente a la iglesia. Observaba como siempre mantenía repostería y gaseosas para darle al que llegaba con hambre. Nadie salia con las manos vacías. Mi abuelita recibía biblias y folletos de la Sociedad Bíblica que yo le ayudaba administrar y preparar para repartir. Con ella aprendí a hablar y compartir el evangelio con denuedo. Yo empeze a repartir Biblias y folletos y emprendí mi primer viaje misionero a Honduras, El Salvador, y Guatemala.

4) No puedo olvidar de mencionar a mi Tía Abuela Amanda (Amandita) Mejía otra mujer de fe que también profesaba con palabras y hechos su fe. En 1976 se enfermo de gravedad y al morir heredo su casa a una pequeña congregación a la cual pertenecía y que después llego a ser la Iglesia Bautista Filadelfia.


5) como no acordarme de aquellos hombres y familias de fe que influyeron mi vida cristiana, Como El pastor Arsenio Tellez y su esposa Doña Graciela Ruiz de Tellez, Sus hijos Tomas, Roberto, Sergio, Israel Tellez. El pastor Eugenio Zamora, Pastor Regino Gonzales, Pastor Pablo García y El Reverendo mi tío Abuelo Moisés García a muchos otros que en este momento no puedo recordar

6) posteriormente muchos años han pasado, y reconozco que la persona que soy hoy se la debo a las generaciones posteriores y consecuentemente como dice la Biblia Jehova visita la tercera y hasta la cuarta generación de los que han confiado en el. Gracias a Dios que así sea por ahora y siempre.

Shalom,
su servidor
Al García

Monday, January 31, 2011

Los Cien Años de la Misión Centroamericana:Terencio y Jose Garcia hermanos del Reverendo Moises Garcia

Los Cien Años de la Misión Centroamericana
*Un detalle desconocido: el Gral. Zelaya regala una Biblia y de sus filas se cuentan primeros evangélicos
* Pasando sobre las antiguas deidades, los ídolos locales, y la primera señora que acepta a Jesucristo
* Apedreado, echado de hoteles, hostigado por los curas, expulsado de los trenes, Benjamín DeRoss nunca retrocedió


Edwin Sánchez
Managua

Pueden haber muchas interpretaciones sobre la sentencia profética pronunciado por Jesús de que la «salvación viene de los judíos», pero si hay una certeza histórica de que algo de ello se cumplió realmente en el Pacífico de Nicaragua fue hace 100 años con la llegada del primer misionero que esparció los evangelios en esta región.

El holandés de ascendencia judía Alfredo Benjamín De Ross llegó cuando nuestro país sólo era tomado en cuenta como territorio de tránsito. La gran obra evangelizadora comenzaba en nuestro patria con este hombre que aparece, en la gran historia del Primer Centenario, como uno de los más destacados en la tarea evangelizadora.

Conocer los detalles de lo que significó el ingreso de evangelistas en esos primeros días, en una región inhóspita, muy tropical para el clima frío de los anglosajones, es lo que hizo el doctor Eduardo Aragón, al abrirnos la posibilidad de conocer los cimientos de la obra, sus personajes, los infortunios, las victorias y hasta las muertes, todo por alcanzar para Cristo a esta nación centroamericana.

En su Reseña Histórica de la Primera Iglesia Evangélica Centroamericana, el autor nos ofrece un pormenorizado informe cotejado con documentos y fuentes vivas, retratos de los misioneros y cómo la misión se iba acentando en un territorio entonces dominado sólo por un credo religioso.

VALIOSA OBRA

Vale destacar esta obra en su notable sentido investigativo y que nos plantea lo que significó el desarrollo de lo que posteriormente se conoció como la Iglesia Misión Centroamericana. Las conmemoraciones del Primer Centenario del Evangelismo en el Pacífico de Nicaragua descubren a otras personalidades de las que no estamos muy acostumbrados a verlas, verdaderos próceres que aunque no aparezcan en en la historia nacional secular, también dejaron una impronta difícil de borrar y que con los años más bien se ha profundizado en la conciencia de una buena parte de los nicaragüenses.

LA PRE MISION CENTROAMERICANA

El libro del Dr. Aragón se inicia con el Período de la Pre Misión Centroamericana y de cómo nace el interés de Francisco G. Penzotti en extender los evangelios más allá de su lugar en los Estados Unidos.

Penzotti nació en 1851 en Chiavena. Convertido al Evangelio, en Montevideo, sirve a las Sociedades bíblicas Americana como colportor - levando la Biblia y evangelizando- en América del Sur.

De acuerdo con el doctor Aragón, en Nicaragua, del primer nombre que se conoce que se entusiasma por la iglesia evangélica es Santiago Alemán, un militar de Diriomo. El recibe una Biblia de parte del General José Santos Zelaya, Presidente de la República, cuando era cadete de la guardia presidencial. Es probable que esa Biblia sea de las introducida por el tenaz Penzotti.

Otro militar que obtiene una Biblia es el General Francisco Montoya, quien no sólo se conforma con poseerla y hacer lo que muchos: abrirla en el Salmo 91, sino que se atreve, y lo hace muy bien, fundar la Iglesia de Nagarote. Fue Penzotti quien le había entregado el ejemplar.

Parte indirecta de la cosecha de Penzotti incluyó al señor Manuel Aragón, quien se convirtió al cristianismo evangélico al leerla. Fue su mamá, Felícita Aragón, quien le regaló las Sagradas Escrituras. La señora Aragón llegó a ser la miembro fundadora de la Primera Iglesia Evangélica Centroamericana de Managua.

El narrador nos hace un llamado de atención: todos estos nombres de nicaragüenses son militares de Zelaya, como el Coronel Manuel Espinoza hijo, pastor en Nagarote, José Mendoza, primer pastor auxiliar de De Ross y después pastor.

Y más altos oficiales: El General José Manuel Argüello, pastor en los años de 1936 de la Iglesia Centroamericana.

HURGANDO MAS EN LA HISTORIA

A medida que el doctor Aragón se introduce más en las profundidades del Génesis nicaragüense, «cuando esta zona era desordenada y vacía» el mapa del nuevo credo va precisando más sus contornos, así conocemos al Dr. Cyrus Ingerson Scofield, un notable abogado cristiano, Pastor de la Iglesia Congregacional, en Dallas, Texas, desde 1882 hasta 1885. El fue el autor de la Biblia Scofield con notas.

En 1888, Scofield visitaba la Costa Atlántica de los Estados Unidos para participar en la conferencia Bíblica del Niágara, en Nueva York. Al entrevistarse con misioneros como el reverendo Judson Taylor, se enteró de que en regiones tan cercanas como Centroamérica todavía no habían recibido el Evangelio.

Scofield al parecer ya no estuvo un momento más tranquilo. Al retornar a su iglesia en Dallas, compartió lo que había recibido del informe a un grupo de hermanos de su congregación. Uno de ellos, el señor Luther Ree hizo una investigación no sólo de Costa Rica sino de Centraomérica, para ver el estado de la obra evangélica.

El informe incluye otras áreas y Scofield reconoce la verdadera situación de estas tierras, lo que profundiza su convicción de que Dios había responsabilizado a los creyentes de Estados Unidos para la evangelización de Centroamérica.

Se puede notar aquí lo que es capaz de producir un texto bíblico, todo un aliento para lo que sería la llegada de la primera obra misionera centroamericana, según luego lo publicó en su periódico:

«Es un hecho de mucha importancia, que en vista del plan inspirado en Hechos 1:8, (Y me seréis testigo en Jerusalén, toda Judea y Samaria, y lo último de la Tierra). Centroamérica es el campo blanco más cerca de nostros. ¿Hemos cuidado de ella? ¿Hemos cuidado de nuestra Samaria?

Scofield comenzó como Cristóbal Colón a buscar el apoyo para emprender su gigantesca tarea, pero le cerraban las puertas. Acudió a las iglesias de Inglaterra y le pasaron «la papa» a las congregaciones de Estados Unidos. Visto así, acudió a sus templos locales, pero ninguna denominación estaba interesada en «lo último de la Tierra». El terco hombre del evangelio escribió en su periódico: «El deber descansa sobre la conciencia de los cristianos de este lugar, sin pensar en su denominación».

Pero el primer país para la misión era Costa Rica, desde donde, puede apreciarse, pensaban alcanzar al resto del istmo. Así, el 14 de noviembre de 1890, se organiza la Misión Centroamericana, con un concilio integrado por el Presidente, Luther Rees, Secretario Cyrus L. Scofield, Tesorero Ernesto Powell, y miembro W. A. Nason. En 1893 se agrega D.H. Scott.

En enero de 1891, dos meses después, se informa que la primera pareja de misioneros se había presentado en febrero de ese mismo año, yéndose hacia Costa Rica: Reverendo Guillermo McConnell y su señora Alvina. En pocos años la obra se extendió a los cinco países: Honduras y El Salvador 1896, Guatemala 1899 y por fin Nicaragua 1900.

ETAPA DE EXPLORACION Y MUERTE

En la etapa de reconocimiento, búsqueda y deseos de plantar la obra, sobresale el pequeño grupo que saliendo de Costa Rica va a Guatemala el 20 de junio de 1894: Francisco Penzotti, los esposos H.C. Dillon, con sus dos niños, Clarence Wilbur, de 25 años. Se integran además, la señora Moore y el señor Odio. Llegando a Granada, Penzotti decide irse a Managua, mientras Wilbur se enferma de fiebre amarilla, falleciendo el 25 de junio de 1894. Por lo peligroso de la enfermedad, fue enterrado el mismo día y fuera del cementerio.

Otra muerte, en 1894, se produce durante la travesìa hacia El Salvador, cuando muere la señora Dillon, y es lanzada al mar, como es la costumbre entre los marinos.

Pero todos estos misioneros todavía no ubican a Nicaragua como destino final, sino como lo que ha sido siempre este territorio que los mismos líderes políticos nacionales se han encargado de reducirla a 130 mil kilómetros cuadrados. Nuestra nación, después del último deceso, quedó seis años sin ser visitada pero ni de pasada por los misioneros.

Fue en 1900 cuando llega a Nicaragua el reverendo Alfredo Benjamín DeRoss, un judío practicante de Amsterdam, Holanda. Benjamín creció observando la religión de sus padres, entre ayunos y las grandes fiestas solemnes como el Hanukka y el Shabbat.

Aprendió el oficio de tallador de diamantes durante tres años y medio, porque según la cultura judía, todo joven de aprender algo para ganarse la vida. Tras ese aprendizaje se marcha a Nueva York donde se envuelve dentro de una cultura menos ortodoxa, acude a bailes y poco del muchacho israelita queda en sus costumbres, pero no abandona a la fuerte comunidad judía de la diáspora.

MALDECIDO POR SU PROPIA MADRE

En Filadelfia se convirtió a la fe evangélica y parece que aquel oficio aprendido en Holanda ahora lo aplicará pero «tallando» almas. Su madre recibe su historia en una carta de 36 páginas y a vuelta de correos recibe lo peor que un hijo se pueda imaginar: «Mi madre me maldijo y mi familia me reprochó de la manera más cruel». Se vio solo. Perdió a todos sus familiares y amigos del judaísmo. Sólo un judío no le abandonó jamás: Yeshua (Jesús)

Era fogoso. Muy encendido en su nueva fe. En México predicó y su verbo se elevó aún por encima de las viejas deidades aztecas, fustigó a dioses que impresionaron tanto a Rubén Darío como Huitzolopochtli. Los pobladores de la comunidad donde había levantado su prédica tomaron todos sus ídolos, los apilaron alrededor de él y pronto estaba oculto detrás del cerco pagano. No se amilanó y volvió a colocarse de frente. Así era De Ross que llegó luego cerca de la frontera tico-nica, ha predicarle a los indios del Río Frío.

UNA NUEVA OBRA

El relata: «Salí de esa zona y comencé un trabajo independiente en Nicaragua. Ningún trabajo misionero se había hecho ahí, con excepción del trabajo realizado en la Costa de los Miskitos por los Moravos, colportores y misioneros que habìan pasado por Nicaragua».

Y así se veía Nicaragua entonces: «En su primer informe, Benjamín precisa que, acampando en San Carlos, el 30 de mayo de 1900, el trabajo era duro, había oposición de la gente, también enfermedades, gente ciega de tradicionalismo religioso, creencias católicas, fanatismo, ignorancia, edilatría; acostumbraban candelas y palmas benditas». Pese a la oposición, DeRoss volvió a pasar encima de los ídolos locales.

LA PRIMERA EVANGELICA

El reverendo Arturo Parajón, citado por el autor del libro, sostiene que «hay constancia que en San Carlos el Sr. De Ross logró la conversión de doña Candelaria Bermúdez, la primera persona que aceptó el evangelio en Nicaragua.

Luego pasó a Masaya, donde hizo una loable labor y posteriormente se traslada a la casa de don Félix Aragón, en la Calle 15 de Septiembre, donde fundó una Escuela, la primera evangélica en Managua. Allí estudiaron Terencio y José García, hermanos del reverendo Moisés García, también un hijo de la señlora Vicenta Gaitán de Diriamba, posiblemente madre de Efraín Gaitán.

El judío holandés en su primera llegada al país recorre Río Frío, San Carlos, Diriamba, Jinotepe, León y Catarina. Los cultos en la capital se establecieron formalmente en la casa del Dr. Alfonso Solórzano, la cual citaba del Callejón de La Aurora, dos cuadras al sur, Palacio de Comunicaciones.

El se fue a Guatemala en septiembre de 1900 y retorna al año siguiente con su esposa Minnie Boyle. La primera gran cosecha estaba a la vista: los primeros 15 bautizados.

PRIMERA IGLESIA CENTROAMERICANA

Fue en la casa antes mencionada que el Sr. De Ross y los que con él compartían la fe, tuvieron el gozo de fundar en Managua la Primera Iglesia Evangélica con los primeros convertidos de Managua y otras ciudades, entonces ya bautizados.

La fecha que se toma como parte de las efemérides evangélicas en Nicaragua es la del 27 de Julio de 1901, como ya lo ha celebrado la tradición, aunque el señor Guillermo Silva Díaz, al celebrarse los primeros 50 años, fijaba el tiempo en mayo de 1901.

Entre los fundadores de esta Primera Iglesia son Julia Ortiz, Petronila Baltodano, Adela Roiz, Rosa Romero, Francisco González, Concepción Somoza, Luisa Chamorro, Felícita Romero de Aragón, en total 24 personas. En la historia, señala el doctor Aragón, no se sabe por qué se omiten los nombres del propio De Ross y Minnie, Manuel aragón, Feliciano Galín, Rubén Leytón y otros.

EL CASO DE MELIDA MEJIA

Entre los muchos capítulos que subrayan la dureza que significó la entrada del evangelismo en Nicaragua, destaca el de Mélida Mejía, quien vendía en un tramo del Mercado Central. Ahí se apareció don Salvador Avilés predicando. Al escucharlo un hombre de la multitud se avalanzó sobre él, diciendo: con esta piedra voy a liquidar a ese...

Doña Mélida le dijo: -!Alto! ¿Le está haciendo algo ese señor? Si usted le tira esa piedra quien le mete este cuchillo soy yo-. Al oír a la resuelta mujer, el tipo desistió de sus intenciones.

El autor también explica que después de fundada la Primera Iglesia Evangélica Centroamericana, los cultos se hacían en la cada del Dr. Solórzano, pagándose 20 dólares mensaules.

En 1903 De Ross escribe a la Misión en Dallas, solicitando recursos para comprar el perimer terreno, lo cual se solucionó cuando Leonarda De Julio de Guzmán, convertida al evangelio, alquila su casa para misioneros y celebración de cultos.

LOS ARAGON

La casa se ubicaba en la Calle 15 de Septiembre 50 varas arriba, de donde más tarde sería el templo de la Primera Iglesia Centroamericana. De acuerdo a Manuel Aragón, la Misión Centroamericana se trasladó de casa del Dr. Solórzano a la casa de la señora Leonarda De Julio Guzmán, el 15 de mayo de 1904, fecha cuando él regresó de la guerra que encabezó el General Emiliano Chamorro contra José Santos Zelaya. Tras dos meses, la Misión se pasa a la casa de sus padres, don Félix y Felícita Aragón.

Pero hay más historia, pero Benjamín De Ross quizás nos resume con sus propias palabras todo lo que hubo de pasar en Nicaragua para que la memorable gesta de diseminar la Palabra de Dios, en cumplimiento de la Gran Comisión de «id por todo el mundo y predicad estas buenas nuevas a toda criatura», echara sus raícez, tal vez más allá de lo que pensaron estos primeros hombres de Dios:

(1911) «Cuando vine a Nicaragua no había un solo evangélico en rtodo el país (Costa del Pacífico), aquellos fueron días de persecución. Los sacerdotes me atacaron en la calle, en los hoteles, en el ferrocarril, quemaban nuestras biblias en basureros públicos, me excomulgaban públicamente, en todos los pueblos que visitaba, demandando a la gente que me maldijeran y me apedrearan. No hubo vez que no me amenazaran con cuchillos, pistolas, etc.».

Historia llena de nobles ciudadanos con corazón de muchos kilates, como el del Reverendo Boanerges Aragón Noli, quien fue un convencido de la capacidad del liderazgo nacional para poder seguir la obra con una mayor dependencia al trabajo y fe propios que el de seguir como cuando «todavía bebían la leche espiritual» de los primeros años.

Al ver que la Misión Centroamericana ha crecido mucho, presentó un plan de trabajo sobre le Gobierno Propio en 1947. Aragón y otros pastores, junto con el abogado Francisco E. Baltodano redactan los estatuos de la Convención De Iglesias Evangélicas, Misión Centroamericana, logrando por fin obtenerel gobierno propio y personerái jurídica en 1949.

En el primer cincuentenario, están convencidos de que «hasta aquí nos ha ayudado Dios» y abren un nuevo episodio en la historia nacional. Con el evangelio sobre sus propios hombros, el pastor Boanerges, Ismael Sánchez de Granada, Rev. Manuel Espinoza de Nagarote prosiguen la comisión.

Aún con todos los obstáculos, teniendo casi a todo el mundo, la tradición y la intolerancia religiosa encima, porque quizás el poeta y sacerdote Azarías H. Pallais era el único que no lanzaba turbas contra «las sectas» como peyorativamente se les llamaba, la Misión Centroamericana se levantó como un gigantesco árbol que además de dar muchos frutos también ha prodigado una fresca y agradable sombra a este país. xxxxxx

RECUADRO

Pastores Nacionales

Desde su fundación en 1901 hasta 1936, la Primera Iglesia Evangélica Centroamericana fue regida por pastores norteamericanos: Alfredo De Ross, Walter Hooper, Carlos D. Hummel y Guillermo Aberle.

En un breve periodo, José Mendoza dirigió la obra, pero ocurrió la primera división, en 1912.

PERIODO NACIONAL

1936-37: General José Manuel Argüello

1937-39: Reverendo Jerónimo Campos Hernàndez

1939-47: Reverendo Rafael Baltodano Zeledón

1947-68 Reverendo Boanerges Aragón Noli 1968-73: Reverendo Moisés García

1973-76 Diácolonos, Dr. Eduardo Aragón, Ingeniero Ramón Gavarrete, Sr. Jonathán Sánchez

1976-80: Reverendo Boanerges Mendoza

1997-1999:Reverendo Guillermo Castillo, Ing. Rafael Acevedo.

1999: Ing. David Sequeira Amador

Tuesday, January 25, 2011

Un siglo de misión bautista en Masaya - El Nuevo Diario - Managua - Don Terencio Garcia


Un siglo de misión bautista en Masaya
* Evocaciones de los misioneros y primeros pastores






EDWIN SOMARRIBA
MASAYA

El Templo Bautista es una institución centenaria y se encuentra en el centro de Masaya rodeado por cuatro templos católicos: por el norte San Jerónimo, por el sur la antigua Parroquia, hoy Basílica de Nuestra Señora de la Asunción, por el este El Calvario y por el oeste San Juan.


Este edificio queda a media cuadra de la antigua casa de dos pisos de Cornelio Hüeck, donde hoy funciona la Alcaldía. A cien metros al norte está el parque central y al oeste queda la antigua casona de adobe donde está la venta de aguardiente que administra don Juan Taleno.

Don Donald Zepeda Iglesias, de descendencia española, folclorista y director desde hace cincuenta años del Baile de Los Diablitos, quien reside a una cuadra del antiguo Templo Bautista, narró a EL NUEVO DIARIO que este edificio fue construido por algunos misioneros que llegaron a la ciudad atraídos por el clima y la tranquilidad de entonces.

Cerca del templo conocido como «El Bautista», también se construyó la casa de don Adán Sánchez, papá de Carlos Adán Sánchez, conocido popularmente como Cobán Sánchez, quien fue destacado profesor del instituto, pelotero del San Fernando, levanta pesas, cronista deportivo y altruista.

Antes de llegar «El Bautista» existió el Liceo de Varones fundado por el ilustre maestro, Federico García Osorno, donde estudió el General de Hombres Libres. En la esquina opuesta, o sea casi frente al costado sur, existe la casa de la familia de Gonzalo Pérez y cerca también vivió el poeta Mario Cajina Vega (q.e.p.d.).

Don Abelino Escorcia Zúniga, poeta, folclorista e historiador de Masaya, sostenía que en 1903 ingresaron a Nicaragua algunos misioneros bautistas extranjeros, pues aquí no se conocía el nuevo culto originado por la obra protestante de Martín Lutero, reformador religioso alemán fallecido en Eisleben, Sajonia, en 1546.

Lutero fue monje agustino y catedrático de filosofía de la Universidad de Ehrfurt en 1505. En 1517, según señala la historia, Lutero se enfrentó al Papa de la época, quien emitió su famosa Bula de Indulgencias. Desde entonces tomó distancia del catolicismo oficial y comenzó a desarrollar su religión protestante con nuevos puntos de vista sobre el cristianismo.

LOS PIONEROS DE LOS BAUTISTAS EN MASAYA

La orden franciscana monopolizaba el negocio de las Bulas, (concesión de los Papas a ciertas órdenes religiosas para negociar Indulgencias vendidas de futuro a los feligreses y poder llevar a cabo una labor). Martín Lutero, por su posición protestante y revolucionaria, fue excomulgado por el Papa León X en el año 1520. Años más tarde en 1525, Lutero contrae nupcias con Catalina de Borja.

Los misioneros que llegaron a Nicaragua pasaron por esta cuidad y entre ellas venían don Francisco Penzotti, don Guillermo Keech, don Alfredo B. De Roos y la señorita Eleonor M. Blackmore, que llegó de Inglaterra.

Tuvieron su primer contacto en la estación ferroviaria de Managua con el agricultor «come yuca» don Simón Cuadra, quien los invitó a visitar Masaya, y de ese contacto se produjo la evangelización paulatina de muchas personas.

El señor Alfredo B. De Roos estableció años después un orfanatorio en la calle del hospital de Masaya. También don Salvador Avilés oficiaba cultos públicos sobre la Avenida del Comercio, pero su labor fue obstaculizada por el catolicismo, y tuvo que abandonarla.

Después continuaron viniendo otros entusiastas y empíricos predicadores de Managua como don Braulio Galín, Don Refugio Morales y don José Mendoza, quienes predicaban en casa de doña Bonifacia Masís en el barrio San Jerónimo, casa que después fue adquirida por doña María Antonia de Meza.

BLACKMORE, PRIMERA MISIONERA EN NICARAGUA

Luego se fueron creando núcleos de adeptos como el de don José Huerta, el de doña Sara Sequeira, el de doña Vicenta Guido, el de don Pablo Marín y otros. También se extendieron estas prédicas a Nindirí, San Blas y Los Altos. En abril de 1916, la sociedad femenil Bautista de Nueva York nombró a la señorita Blackmore su misionera en Nicaragua.

Un año después esta misionera se radicó en Masaya y ocupó la casa de doña Adela Huembes, ubicada en la calle del Calvario, junto a la mansión de don Rodolfo Collado.

El grupo bautista ocupó varias residencias en lugares céntricos de la ciudad y su comportamiento se desarrolló con mucha honestidad.

La iglesia Bautista de Masaya en 1918 fue conformada por doña Micaela Cruz, doña Josefa Cuadra, doña Trina Alguera, doña Bonifacia Masís, don Ramón Pérez, doña Rosa de Pérez, don José Balmaceda, don Felipe Cuadra, don Casimiro Cruz, don Refugio Morales, don José Díaz, don Francisco Sáenz, Don Braulio Galín, don Terencio García y otros más.

En este mismo año de 1918, la Junta Misionera de Nueva York subvenciona a la iglesia Bautista de Masaya dotándola de un gran salón con su correspondiente y adecuado mobiliario, nombrando como pastor de esta iglesia a don Manuel Ledezma.

INCIDENTE CON CATOLICOS

Cuando el servicio de inauguración se desarrollaba, pasaba por la casa donde efectuaban el culto, una procesión de católicos y en ese instante que don José Mendoza predicaba saltó la chispa de la discordia entre ambos bandos armándose una trifulca, la cual produjo algunos golpeados, pero sin mayores consecuencias.

Los bautismos a la religión protestante se realizaron en las aguas de la Laguna de Masaya, los cuales eran suministrados por un ciudadano de apellido Brewer, quien emulaba la labor de Juan, el legendario personaje bíblico del Jordán.

Entre las personas bautizadas figuran don Manuel Antonio Rocha, quien posteriormente construyó el nuevo bautisterio en el Templo Bautista. El señor Rocha, en 1936, por ser un decidido defensor de la clase trabajadora, fue confinado a la lejana y desierta islita del Caribe, Little Corn Island, acusado de comunista.

El 25 de junio de 1924 la señorita Blackmore compra una casa al señor Pelayo Porta que después sirvió de iglesia y posteriormente construyó el actual Templo Bautista.

MASAYA Y SU TEMPLO BAUTISTA

El dos de enero de 1927 el Reverendo Carlos H. Scott llega al país para asumir la superintendencia general de la misión, dándole más brillo a los trabajos bautistas en Masaya. En 1934, asume el pastorado de esta iglesia Bautista el Reverendo José Antonio Corea, graduado en el Instituto bíblico de Costa Rica y en el Seminario Hispanoamericano de los Angeles, California.

En ese tiempo el Reverendo Scott gestionó ante la Junta Misionera de Nueva York para conseguir el dinero con el cual poder erigir un edificio que sirviera de Iglesia. La gestión tuvo éxito y Masaya tendría un nuevo Templo Religioso.

En diciembre de 1937 inician los trabajos del edificio. El pastor Corea emprende una campaña económica para conseguir más fondos y ayudar a los gastos de construcción que la misión había comenzado.

Después que la labor evangelizante había ocupado muchas casas en la ciudad sin tener un hogar propio, fue que el dos de septiembre de 1938, cuando el sector protestante de Masaya estrenó su confortable edificio de cemento armado en una inauguración a la que asistió lo más destacado de la religión protestante del país.

LOS HISTORICOS PASTORES

Ese día fue leída el acta conmemorativa por don Adán Pacheco. En el acto solemne, el Reverendo Corea colocó en el púlpito la Biblia, el nuevo himnario evangélico, el acta conmemorativa y la historia Bautista de Masaya, las cuales han de ser guardadas para la posteridad. Por la noche hubo cultos y coros religiosos entonaron sus cánticos de gracia junto a la animada concurrencia.

Por esta misión han desfilado pastores y reverendos con don Braulio Galín, don José Mendoza, don Aarón Vásquez, don Manuel Ledezma, don Ramón Pérez, don Francisco López Espinoza, Aurelio Gutiérrez, Arturo Parajón, Bernardo Vásquez y Fidel Saballos.

También Sinforoso Chávez, José Antonio Correa, Juan Vásquez H, Heriberto Vásquez, doctor José María Ruiz, don Pastor Gutiérrez, Francisco N. Fuentes, Eugenio Zamora, Oscar Espino, Rolando Gutiérrez, Arsenio Téllez, Regino González y otros más.

Hay que hacer mención que en esta obra evangelizadora jugaron al principio un papel preponderante, la señorita Eleonor M. Blackmore, don Charles S. Scott y señora Lola de Scott, lo mismo que don Roberto W. Dixon y señora Ana Fulton de Nixon.

En la actualidad, en el edificio de la iglesia se desarrolló una encomiable labor educacional. En los anexos del local se estableció un colegio de enseñanza primaria y con el devenir de estos últimos años se han ido agregando en forma paulatina años de enseñanza secundaria, con muy buen éxito pedagógico.

Esta iglesia es una de las más antiguas de Nicaragua, después de la de Managua. Esta iglesia echó raíces en la primera década del presente siglo y en su local se han llevado a efecto numerosas convenciones, misiones y otras tareas más de esos cultos, tanto locales como nacionales.